"Mentiras, mentiras y más mentiras"

Ni la utilidad del mentir es sólida,ni el mal de la verdad perjudica mucho tiempo.

Juan Luis Vives (1492-1540) Humanista y folósofo español

...-“Si no te comes la comida te va a llevar el cuco”-
-¡Mentira! El “cuco” ¡no existe!- (MENTIRA BLANCA)
-“Tu diagnostico no es claro todavía”-
-¡¡Mentira!!! “Tienes cáncer”- (MENTIRA PIADOSA)
-“Soy separado, pero todavía vivo con mi esposa por los niños”
-¡Mentira!!! ¡No piensa separarse! (MENTIRA CÍNICA)
-“José dijo que lo llamaras”
-¡Mentira!, ¡José nisiquiera sabe que existes! (MENTIRA CRUEL)
-“No te tengo ninguna llamada perdida tuya en el teléfono”
.¡Mentira! “Te llame mil veces y los telefónicos celulares (todos) ¡tienen registro de llamadas!” (MENTIRA ESTUPIDA)...

Tuve que escribir ejemplos como estos para darme cuenta de que la palabra “Mentira” esta dividida en muchas categorías, algunas, muy bien aceptadas por las personas porque su fin es “maquillar” un poco la realidad para “no dañar” a esa persona que por algún motivo no puede enterarse de la verdad(mentira piadosa). También los padres, a veces, inventamos algunos “trucos” para “enseñarles” a nuestros hijos algunas técnicas de disciplina e “intentar corregirlos” (mentira blanca). Además, sabemos que existen “otros” que no tienen la mínima dificultad para mentir, éstas salen de sus bocas con una naturalidad increíble, y hasta a veces, nos dejamos enredar tanto por ellos que nunca, pero nunca, sospechamos que nos están mintiendo (mentira cínica). Estamos expuestos a que “mas de alguno” nos quiera “jugar una broma” o una mala pasada y nos invente una historia increíble, que nos haga ilusionarnos ,y que después, cuando nos demos cuenta que esta muy lejos de la realidad, suframos como locos por ello (mentira cruel) Y hay una categoría aun peor, esa mentira que a veces se nos restriega en la cara, tratando de hacernos quedar como “idiotas” que no nos damos cuenta de la verdad (mentira estúpida).
Me pregunto... ¿Son necesarias la mentiras?
Veamos, que pasa si hacemos un balance de esto, imaginemos una balanza, de un lado, pongamos la mentira con todas sus categorías, beneficios y características , y del otro nos ponemos nosotros, con toda nuestra inteligencia, raciocinio y sentimientos.
Seguramente se inclinara hacia nuestro lado, porque aunque “en este mundo cruel” la mentira esté tan arraigada en los seres humanos, (pasando a ser tan común como respirar, ver o comer), y sea utilizada diaria y normalmente por nosotros (como los teléfonos, los autos o un computador), tenemos que entender que “la balanza” esta de nuestro lado porque ,“No” importa la categoría, el beneficio que podría traer o las características de la mentira , el hecho es que en definitiva, ¡Nos Hace Daño..¡Nos menoscaba!. ¡Nos subestima!
Y seguramente hay miles de explicaciones....
Pero solo una es la que resume todo....
“Discernir” (discernimiento). Todos sabemos que lo que no diferencia de los animales es precisamente esto, ya que somos capaces de distinguir una cosa de otra, señalando las diferencia que hay entre ellas, por lo tanto, ¡Somos seres racionales!. No necesitamos ni vendas, ni maquillajes, ni mucho menos estupideces para aceptar nuestra verdad y como la afrontemos es una decisión personal que todos deberían respetar, por eso, no es justo que nos mientan, porque nos quitan el libre derecho a “Decidir”. (que es de los pocos derechos que nos van quedando)....
¿Y los niños?..... Con paciencia, buena voluntad y mucho amor veremos que siempre con la verdad por delante ellos “entenderán”.
Ahora cuando estoy conversando con alguien y me miente, ¡Me ofendo!, porque seguramente,(al atreverse a decirme mentiras) cree que “Soy una idiota”. Y.... seré “todo”... menos eso....